La representación de la diversidad en las series

  

Buenas, queridas lectoras de PASIVERA.

Hoy os traemos una serie de recomendaciones audiovisuales sobre las que pretendemos que reflexionéis, dado que ya nos han hecho reflexionar a nosotras antes, pero sobre todo que empaticéis, os veáis representados o simplemente aprendáis.

Es más, yendo un poco más allá de la reflexión, la curiosidad y el aprendizaje que pueden aportarnos estas series y películas, queríamos resaltar la importancia de vernos reflejados en aquello que consumimos día a día, la necesidad de tener referentes en todas nuestras etapas vitales y en momentos cruciales de nuestra vida, tales como aceptar la marcha de una persona y gestionar el duelo o como el cotidiano hecho de descubrirse y aceptarse a uno mismo. 

 

Nos pone muy contenta que cada vez haya más representación de toda la diversidad que conformamos las personas, aunque eso no significa que esté todo hecho. 

 

Pero no por ello vamos a dejar de resaltar aquello que sí se lleva a cabo a día de hoy, por lo que...¡Comenzamos! 

• Heartstopper: es una serie de televisión británica de drama y romance adolescente, basada en la novela gráfica del mismo nombre creada por Alice Oseman.

 

Esta serie, que ha tenido su boom recientemente, es un claro reflejo de lo que mencionamos al inicio. Muestra con naturalidad un proceso por el que pasan muchos adolescentes: darse cuenta de que les gusta una persona de su mismo género (aparecen más representaciones de el colectivo lgtb+, en general, pero la historia principal, la trama de los protagonistas es esta).

Lo mejor de ello es que lo transmite desde la ternura, consigue que sientas desde la inocencia de la adolescencia, de ser aún un niño, todas esas primeras veces. Naturaliza aquello que en realidad es natural pero la sociedad anormaliza: ser tú mismo. 

Pese a que todo está narrado desde esta visión tan dulce, consigue a su vez que sientas con crudeza el malestar, el dolor, el miedo y las dudas que se sienten cuando te enfrentas a ello, además de la realidad que viene después de aceptar y gritar quién eres.

 

En la misma serie destacan la importancia de tener referentes que te hacen la incertidumbre y el miedo un poco más pequeños, que en este caso es uno de los profesores. El apoyo y los consejos que le da este personaje al protagonista muestran la importancia de ser acompañado.

 

A nosotras, personalmente, nos ha enamorado.

• My mad fat diary: "una niña de 16 años de edad, que pesa 231 libras, Rae, y que acababa de salir de un hospital psiquiátrico, donde pasó cuatro meses internada. Rae comienza a rehacer su vida y reanudar su amistad con su mejor amiga de la infancia llamada Chloe, que no es consciente de la salud mental de Rae y de los problemas de imagen corporal que tiene, ya que le hicieron creer que ella estuvo durante todo ese tiempo en Francia. Rae intenta evitar que esta información salga a la luz pública, tratando de impresionar a los amigos de Chloe; Izzy, Archie, Chop y Finn, además de intentar tener una vida como la de cualquier adolescente".

Esta serie es una de mis favoritas, porque muestra una serie de mensajes muy importantes en muy pocos capítulos. Deja ver, de forma muy realista, los obstáculos diarios a los que se enfrentan las personas con problemas de salud mental y tca.

 

La protagonista te describe su realidad, que es en realidad bastante difícil y que está muy a la orden del día, desde el humor y a través del pensamiento adolescente que tan bien representado está por medio su diario. 

 

Consigue hacerte llegar el dolor y la frustración que siente Rae, sin adornos, tal como ella lo piensa y lo siente. Te enseña que en realidad cada uno libra sus batallas a diario y que, a veces (la mayoría), ni siquiera somos conscientes de ello. Te hace sentir mucho con cada una de las escenas.

 

Además, deja claro, durante sus progresos, que pedir ayuda no está mal, se aleja de esa imagen negativa que se tiene de ir al psicólogo y muestra que a veces es necesario dejarse acompañar. Aunque al inicio Rae finge que todo está bien, podemos apreciar cómo se acaba dejando ser, como abraza y admite el dolor para poder superarlo.

Una de las cosas que más me alucina de esta serie, aunque al principio no me gustó demasiado, es la importancia de tomar decisiones como la que toma la protagonista al final... ¡pero no voy a haceros spoiler, tranquilas!

 

Os dejo una de mis escenas favoritas, por si os apetece verla:

 

 

• Merlí: "Merlí Bergeron es mucho más que un profesor de filosofía. Es un hombre de moral muy particular, mordaz, seductor, original, irónico y divertido con un afilado humor negro. Un personaje cínico que irrita, pero también apasiona. Es, en definitiva, una figura impactante, incapaz de dejar indiferente".

Merlí es una serie que, a través de la cotidianedad de los personajes que la protagonizan, acerca la filosofía a la vida real. Consigue engancharte, hacerte reflexionar y sentir a través de los consejos, los errores y las enseñanzas del profesor.  

 

Este profesor de filosofía motiva, a través de métodos poco convencinales, a sus alumnos a convertir el acto de pensar en una constante rutinaria en sus vidas.

 

Merí te permite ver que la filosofía es en realidad práctica, que es el día a día de cada uno de nosotros, es la toma de decisiones y el pensar y reflexionar cotidiano, no una serie de teorías incomprensibles que hay que memorizarse para aprobar un examen y luego olviddar.

 

Nos encanta esta serie porque le da a la filosofía la importancia y el lugar que debería tener.

 

 

 

•  Sex education: "Otis, un joven socialmente incómodo, que es ambivalente sobre el sexo, debido a que su madre es una terapeuta sexual que es franca sobre todos los aspectos de la sexualidad. Después de ayudar inadvertidamente al acosador de la escuela con su ansiedad por el rendimiento sexual, Otis establece un negocio de asesoramiento sexual con Maeve, una compañera de clase confiada pero problemática, para educar a sus compañeros sobre cómo lidiar con sus propios problemas sexuales". 

Sex education es una serie que deja claro la necesidad de educación afectivo-sexual, sobre todo en la adolescencia, y lo hace ejemplificando las consecuencias que tiene la gran desinformación sobre afectividad y sexualidad y todas las dudas y problemas que nos surgen a raíz de ella. 

Esta serie habla de temas que socialmente son tabú e incómodos, pero por las que en realidad todos pasamos en mayor o menor medida y cercanía, y profundiza, además, en la búsqueda de comprenderse a uno mismo. 

Habla, además, del acoso sexual al que nos enfrentamos las mujeres día a día a través de una escena tan cotidiana como es, por ejemplo, coger un autobús. Muestra de una manera muy real cómo puede afectar algo tan desagradable e incluso traumático en el resto de ámbitos de la vida. No obstante, deja ver también algo tan fundamental como lo es el feminismo y la sororidad.

 

 

 

• Atypical: Sam, un chico de 18 años con Trastorno del Espectro Autista, emprende un viaje para encontrarse a sí mismo, conocer el amor, la independencia y desafiar a su familia.

En la serie se tocan temas como la inclusión, el respeto, el amor, la amistad y la lucha que cada uno hace para conseguir sus sueños y lograr sus metas; y esto lo hace a través de la vida cotidiana de una familia y los diferentes obstáculos y problemas que se les van poniendo delante, así como la forma tan humana que tienen de resolverlos.

Te muestra de forma muy ligera y natural las dificultades a las que se enfrenta el protagonista que, a priori, te pueden pareces estúpidas pero que, a través de los ojos del protagonista puedes entender a la perfección. 

 

Desde el principio, 'Atípico' quiso ser una ficción que mostrase el trastorno del espectro autista de un modo realista. Por eso, se contó con el asesoramiento de Michelle Dea, trabajadora del Centro de Investigación y Tratamiento del Autismo de la UCLA. Y, a partir de la segunda temporada, se incorporó al equipo de guion David Finch, quien también es autista.

 

 

 

 

Y hasta aquí la entrada de hoy. 

 

Esperamos que os gusten estas recomendaciones, que os hayan llamado la atención al menos, y que, si os decidís por verlas, nos comentéis qué tal.

¡Hasta otra!